The Tombs Movie News - David Jenkins
Jafar Panahi es uno de los representantes del nuevo movimiento cinematográfico iraní. A pesar de ser aclamado en Europa, sus dos anteriores películas «El círculo» y «Crimson Gold» fueron prohibidas por el gobierno iraní. Empezó su carrera cinematográfica como documentalista, un género que le ha ayudado a realizar sus obras de ficción más recientes. Sus películas suelen cuestionar las idiosincrasias que nacen en el islam actual.
¿Qué le empujó a rodar una película acerca de un partido de fútbol?
Leí el artículo de un famoso periodista de deportes iraní donde contaba que las mujeres de la Antigua Grecia tampoco podían asistir a los acontecimientos deportivos. Una de ellas tenía un hijo atleta y decidió vestirse de hombre para poder verle.
¿Cómo orquestó la película? ¿Rodó durante un partido real?
Fue un poco como un docudrama rodado en tiempo real. La mayoría de las escenas se rodaron durante el partido para aportar mayor realismo a la película.
Siendo así, ¿los actores tuvieron que improvisar mucho?
No contraté a ningún actor profesional y era imposible controlar absolutamente todo lo que ocurría delante de la cámara por mucho que respetaran el guión. En la mayoría de los casos, dejaba a los actores y planeaba la siguiente secuencia de acuerdo con sus reacciones. Mientras rodábamos, no estaba muy seguro de qué iba a pasar. Queríamos que Irán ganara como fuera, pero no sabíamos si ocurriría.
¿Había pensado en la posibilidad de que Irán perdiera?
Habríamos debido adaptarnos, pero el guión no contemplaba esa posibilidad. Era necesario que Irán marcara en el segundo tiempo para dar ímpetu a la película y, por suerte, fue exactamente así.
El final de OFFSIDE es diferente del de sus anteriores películas, ofrece un rayo de esperanza para el futuro. ¿Era esa su intención?
Sí, desde luego. Quería comunicar la esperanza que había sentido en ese partido. Once jugadores se juntan. Cada uno tiene su técnica, su ideología, su carácter, pero todos tienen el mismo objetivo. Es una metáfora de la nación. Los soldados y las mujeres de la película son muy diferentes los unos de los otros, pero todos quieren lo mismo: que Irán gane el partido.
Aunque la película habla de cómo se trata a las mujeres en Irán, los personajes masculinos también tienen una historia. ¿Es un comentario sobre la juventud en general?
He intentado enseñar la realidad iraní, lo que se puede y no se puede hacer. Parece que lo principal sea que las mujeres no pueden entrar en los estadios, pero la película va mucho más allá. Al igual que en «El círculo», se ven las historias de cada personaje, pero también cómo funciona la sociedad. Busco historias que me permitan hablar de otros temas.
¿Es difícil rodar películas con temas candentes en Irán?
Sí, claro, es difícil. También había dificultades antes de la revolución. Lo más importante para un cineasta es hacer la película y enfrentarse a los problemas, como puede ser la censura, cuando llegue el momento. Lo importante es seguir adelante y rodar.